*          ¿Cómo comienza el Libro 1 de Samuel?  ¿Quién es Samuel?

Aparece Samuel en la historia de manera muy bella:  su madre no ha podido tener hijos y suplica a Yavé, diciéndole que si le da un hijo varón, lo entregará  por todos lo días de su vida y la navaja no pasará por su cabeza ”  (1 Sam 1, 10-11).

Luego Ana quedó embarazada y dio a luz un niño a quien llamó Samuel, porque dijo se lo había pedido a Yavé. (1 Sam 1, 20).  Samuel significa: "pedido a Dios" o "Dios ha oído".

Efectivamente nace Samuel, quien ungirá los primeros dos reyes de Israel y tendrá una triple misión, pues será Profeta, Sacerdote y Juez.

Y Ana cumple su promesa a Yavé y entrega a Samuel a Yavé en manos del Sacerdote Helí.

*          Pero ¿qué pasaba con los Sacerdotes hijos del Sacerdote Helí?

Los hijos de Helí cometían un pecado muy grande:  violaban las ofrendas de los sacrificios a Yavé, extrayendo parte de la carne de los animales de los sacrificios para comerla ellos.

*          ¿Y su padre el Sacerdote Helí qué hacía al respecto?

Les llamó la atención suavemente y no tomó las medidas adecuadas a tan graves faltas.

*          ¿Qué sucedió a Samuel una noche mientras dormía?

Dios lo llamaba y él creía que quien lo llamaba era Helí.  Entonces hizo lo que el Sacerdote Helí le recomendó.  Cuando sintió que la voz llamaba Samuel, Samuel, él respondió:  Habla, Señor, que tu siervo escucha.

*          ¿Qué utilidad tienen para nosotros esas palabras de Samuel respondiendo a Dios:  Habla, Señor, que tu siervo escucha?

Cuando nos damos cuenta que Dios nos está llamando, sea a través de una persona, de una lectura, de una predicación, etc., la actitud que El espera de nosotros es que nos pongamos a su disposición.  Es la actitud que nos ayudará a poder seguir a Dios como El nos está pidiendo.   Es la manera de seguirlo para hacer su Voluntad y para tener una relación más profunda con el Señor.

*          ¿Qué le encomienda Yavé a Samuel cuando le responde a su Habla, Señor, que tu siervo escucha?

Le encomienda decirle a Helí:  Tú le anunciarás que yo condeno a su familia para siempre, porque sabía que sus hijos ofendían a Dios y no los ha corregido.

*          ¿Qué enseñanza podemos obtener del trato de los padres a los hijos en cuanto a la corrección de sus faltas?

Dios exige que los padres corrijan a sus hijos y que éstos acepten las correcciones.  Eso es parte del Cuarto Mandamiento:  Honrar padre y madre.

A veces pensamos que el consentimiento y la permisividad son muestras de amor.  ¡Falso!  Quien ama corrige.  Dios nos ama infinitamente ... y nos corrige.

*          ¿Qué consecuencias tuvieron los pecados de los hijos de Helí y la permisividad de Helí ante tan graves pecados?

Mueren los hijos de Helí y muere también Helí.  Pero lo peor fue lo que sucedió con el Arca de la Alizanza:  Helí quedó horrorizado de que los Filisteos se adueñaran del Arca de la Alianza, y muere al caer para atrás en  el momento que le dan esas noticias.

*          ¿Qué problema tenían los Israelitas y qué les dice Samuel al respecto?

Israel estaba siendo superada por sus enemigos. Samuel se dirigió al pueblo diciéndoles:  “Si ustedes vuelven a Yavé con sinceridad y quitan de en medio de ustedes los dioses extranjeros ... si permanecen fieles a Yavé sirviéndole sólo a El, entonces Yavé los librará de los Filisteos.”  Los israelitas, pues, expulsaron los baales y las astartés y se pusieron a servir sólo a Yavé.  (1 Sam 7, 3-4)

Ayunaron ... y dijeron:  “Hemos pecado contra Yavé”  Y fue Samuel quien dirigió esta asamblea de los israelitas” (1 Sam 7, 6).

En el mismo momento en que Samuel ofrecía el sacrificio, los filisteos relanzaron al ataque contra Israel,  Pero la voz de Yavé resonó como un trueno en medio de los filisteos, cundió el pánico entre elos y fueron vencidos por los hombres de Israel (1 Sam 7, 10).

*          ¿Qué sucede en el Capítulo 8?

Todo cambia.  Es un capítulo determinante:

Israel pide un rey.            

*          ¿Cuál es la posición de Samuel con respecto de un rey para Israel?

Samuel, que tiene un corazón para el Señor, sabiendo que el Rey era Dios, no le gustó nada la petición de un rey e invocó a Yavé (1 Sam 8, 6).

Les advierte que con un rey no les irá muy bien, pero ellos insisten y Dios les manda a dar lo que piden. 

*          ¿Cómo se llama el primer rey de Israel y cómo era físicamente?

Se llamó Saúl. Saúl era joven y de bella presencia, además de que sobrepasaba a todo el mundo en estatura (1 Sam 9, 2).

*          Además de ungirlo como Rey, Samuel le dio unas instrucciones muy precisas a Saúl de parte de Dios.  ¿Cuáles son?

Baja, pues, delante de mí a Guilgal y yo iré a juntarme contigo para ofrecer víctimas y sacrificios a Yavé.  Esperarás siete días, hasta que yo venga a ti  y te diga lo que debes hacer” (1 Sam 10, 8).

*          ¿Cuál fue el pecado de Saúl?   ¿Por qué fue rechazado por Dios?

Antes de una batalla, en un momento en que estaban en peligro los israelitas, la gente empezó a huir y todo el pueblo temblaba de temor.  Saúl esperó siete días conforme al plazo que Samuel le había fijado para encontrarse con él, pero Samuel no llegó cuando Saúl creía que debía llegar.  Saúl no esperó, como le había indicado el Profeta-Sacerdote y se abrogó las funciones del Sumo Sacerdote:  ofreció él mismo el sacrificio.

Acabando de celebrar el sacrificio, llegó Samuel, quien al darse cuenta de lo ocurrido le dijo a Saúl lo reprende severamente por haber tomado para sí las funciones del Sacerdote.

*          ¿Cuál fue el error de Saúl?

No supo esperar el momento del Señor.  No fue totalmente obediente al Señor.  No supo seguir al pie de la letra la instrucción de Yavé a través de Samuel.

Saúl tiene un problema con la confianza en Dios, por eso cometió un error y un pecado. 

*          Pero Saúl cometió otro pecado más.    ¿Cuál fue? 

Saúl no cumplió las órdenes de Dios respecto a Amalec, el jefe de los amalecitas.

*          ¿Cuáles eran esas órdenes y qué hizo Saúl?

La ley del anatema:  eliminar todo, inclusive al rey de los amalecitas.  Y Saúl no cumple esta ley, sino que se reserva algunas cosas que debían quemarse y deja con vida al rey de los Amalecitas.

*          ¿Qué hace Yavé?

Descarta a Saúl como rey.  Dice a Samuel:  Me arrepiento de haber hecho rey a Saúl, porque se ha apartado de mí y no ha cumplido mis órdenes. (1 Sam 15, 10).

*          ¿Cuál es la respuesta de Saúl?

Se excusa, no se arrepiente, no reconoce su pecado.

*          ¿Qué ordena Yavé a Samuel?

“Quiero que vayas a casa de Jesé en Belén, porque he elegido a uno de sus hijos para ser mi rey” (1 Sam 16, 1b).

Jesé le presentó a siete de sus hijos, pero a ninguno eligió Yavé. 

*          ¿Qué sucede?

Sucede que faltaba el menor de todos, muy jovencito aún, que estaba cuidando las ovejas.

Al llegar el niño David, rubio, de lindos ojos y buena presencia,  Yavé dijo:  “Levántate y conságralo con aceite, porque es éste” (1 Sam 16, 12).

*          ¿Qué nos muestra el hecho de que el escogido, el niño David, era el menor, el menos importante, el que ni siquiera estaba presente cuando Samuel llegó?

David estaba simplemente cumpliendo su deber, obedeciendo a su padre:  pastoreando las ovejas. 

Dios se fijó en el joven humilde, piadoso, sencillo, puro, firme que era David.  Lo que vale a los ojos de Dios son las virtudes del corazón, no las apariencias.

*          A todas éstas… ¿qué está sucediendo con Saúl, quien sigue siendo rey actuante?

El espíritu de Yavé se había apartado de Saúl y un espíritu malo lo atormentaba.

*          ¿Por qué lo atormentaba un espíritu malo?

Al apartarse uno de Dios, los espíritus malignos pueden molestar mucho.  Un espíritu malo mandado por Yavé significa que como Saúl ya se había apartado de Yavé, un espíritu malo entonces tenía poder sobre él, pues Dios ya no estaba con él. 

*          ¿Qué hacen con Saúl, entonces?

Tuvieron que buscar a alguien que tocara música para aliviarlo de estos tormentos. 

*          Y ¿a quién le buscan?

Nada menos que a David.  Llegó David donde Saúl y se quedó a su servicio.  Este le tomó mucho cariño y lo hizo su escudero (1 Sam 16, 21-22a).

Cuando el espíritu atormentaba a Saúl, David tocaba la cítara y Saúl encontraba calma y bienestar, y el espíritu malo se apartaba de él.

*          ¿Cómo surge el enfrentamiento con Goliat?

Goliat, quien medía 6 codos (3 metros) retó a Israel a un duelo personal:  él contra el mejor de los israelitas.  Así amenazaba: 

Si es más fuerte que yo y me mata, nosotros seremos sus esclavos, pero si yo soy más fuerte y lo mato, entonces ustedes serán nuestros esclavos y nos servirán... Al oír esto, Saúl y todo Israel quedaron asombrados y asustados (1 Sam 17, 4 y 9-11).

Saúl era el hombre más alto de Israel y era el Rey, pero no se atrevía a enfrentar a Goliat, porque no tenía confianza en Dios.

David no se arredra ante el gigante filisteo y se ofrece para enfrentarlo, asegurando que obtendrá la victoria, pues Yavé lo librará de Goliat.

David dijo a Saúl:  “No hay por qué tenerle miedo a ése!  Yo, tu servidor iré a pelear con ese filisteo ... Cuando estaba guardando el rebaño de mi padre y venía un león o un oso y se llevaba una oveja del rebaño, yo lo perseguía y lo golpeaba y se la arrancaba.  Y si se volvía contra mí, lo tomaba por la quijada y lo golpeaba hasta matarlo.  Yo he matado leones y osos; lo mismo haré con este filisteo que ha insultado a los ejércitos del Dios vivo.  Yavé que me ha librado de las garras del león y del oso, me librará de las manos de este filisteo” (1 Sam 17, 32-36).  

*          Un jovencito indefenso enfrentado a un gigante agresivo.  ¿Qué sucedió?

Goliat, no sólo era un gigante, sino que estaba protegido desde la cabeza hasta los pies, era imposible atravesarlo con una flecha (1 Sam 17, 4-7). 

*          ¿Cómo podrá vencerlo David?

David tomó su cayado, escogió en el río cinco piedras lisas y las colocó en su bolsa de pastor.  Luego avanzó hacia el filisteo con la honda en la mano. (1 Sam 17, 40)

Goliat gritaba amenazante:  ¡Que mis dioses te maldigan! ¡Ven a atacarme para poder así tirar tu cuerpo a las aves de rapiña y a las fieras salvajes! (1 Sam 17, 44).

David le respondió:  “Tú vienes a pelear conmigo armado de jabalina, lanza y espada; yo, en cambio, te ataco en nombre de Yavé, el Dios de los Ejércitos de Israel, a quien tú has desafiado” (1 Sam 17, 45).

Cuando el filisteo se lanzó contra David, éste metió rápidamente su mano en la bolsa, sacó la piedra y se la tiró con la honda.  La piedra alcanzó al filisteo, hundiéndosele la frente.  Este cayó de bruces al suelo.  David, entonces, corrió y se puso de pie encima de su cuerpo, tomó la espada de Goliat y lo remató cortándole la cabeza.  Los filisteos, al ver muerto a su campeón, huyeron.  Pero el ejército de Israel y de Judá los persiguieron y los vencieron.  (1 Sam 17, 48-52)

*          ¿Qué sucedió, entonces, con David?

David, por supuesto, se hizo muy famoso, especialmente entre las mujeres, quienes cantaban:  Saúl mató a mi y David a diez mil (1 Sam 18, 7). 

*          Y ¿qué sucede entonces a Saúl?

Este se puso muy celoso y decía:  lo único que le falta es el reino.  A partir de ese día Saúl miró a David con malos ojos (1 Sam 18, 8c).

Saúl se había hecho orgulloso y había desobedecido a Dios.  En su orgullo no podía soportar que David fuera más popular que él.

*          Y ¿al dar paso a estos pensamientos malignos de envidia qué se atreve a hacer?

Al día siguiente lo volvió a atormentar el espíritu malo y mientras David tocaba la cítara para él, trató de clavar a David en la pared con su espada, pero David esquivó el golpe dos veces.  Ahora está David huyendo de Saúl  (!!!???).

Ojo con la envidia.  Debido a que alababan a David más que a él, Saúl dejó que la envidia tomara posesión de él.  Y así llega –como otros en esta historia- al asesinato, aunque Dios no permitió que matara a David.

Saúl comunicó a su hijo Jonatán y todos sus servidores su decisión de dar muerte a David, pero Jonatán, que quería mucho a David se lo fue a decir a éste (1 Sam 19, 1).

Jonatán no sólo informó a David de las intenciones de su padre, sino que convenció a su padre que David no le había hecho sino grandes servicios y ningún daño, por lo que no debía matarlo.  Además ayudaba a David a esconderse de Saúl.

*          ¿Qué hacía David en esta etapa en que Saúl lo perseguía?

David perdonó la vida de Saúl dos veces, pero le hizo saber que hubiera podido matarlo, y decía a sus hombres: “No puedo poner la mano sobre el ungido de Yavé” (1 Sam 24, 7b) 

*          ¿Cómo muere Saúl?

Saúl queda mal herido y ruega a su escudero que lo mate, pero éste no lo hace.  Entonces Saúl se lanza sobre su propia espada. (1 Sam 31 ,4-5)

*         ¿Podía Saúl mandarse a matar o quitarse la vida?

Absolutamente no.  Sólo Dios da la vida y la quita.  Saúl pecó de orgullo  (1 Sam 31, 4:  no sea que esos infieles lleguen a burlarse de mí) y pecó contra el 5º Mandamiento (No matar), cometió suicidio para no caer en manos de los filisteos.  Todo esto está estrictamente prohibido por la Ley de Dios.

Así vemos cómo un pecado de envidia, al no arrepentirse y corregirse, puede causar una cadena de pecados y llevar a un final tan desgraciado.

*          ¿Qué ejemplos de virtud nos da David en esta etapa de su vida?

Humildad:  se mantuvo humilde a pesar de las alabanzas que le hacían.  Tampoco hizo alarde de su condición de rey ungido, que lo fue por cierto tiempo.

Magnanimidad:  No mantenía rencor contra el malagradecido e injusto Saúl.  Nunca se le sublevó (a pesar de ser él rey ungido) y siempre lo honró como su Señor y su Rey.  Lo perdonó.  No se vengó de ninguna manera, ni devolvió mal por mal.  Lloró la muerte terrible de Saúl. 

Amor a los enemigos:  Es un precursor del mandamiento que nos da Jesús posteriormente en el Sermón de la Montaña, pues Saúl era su enemigo que buscaba matarlo. 

*          ¿Qué libros complementarios tenemos en esta primera etapa de la dinastía real?

Los Salmos.  Muchos, la mayoría, son atribuidos a David.  Algunos hablan de cuando David huía de Saúl y de esta etapa de su vida:  Salmos 59, 56, 34, 142, 63, 52, 54, 57, y 7.   Pero hay muchos otros Salmos de David.  Estos dos que usaremos como oración han sido atribuido a él también.