Ex. 3:
18. Los jefes de Israel te harán caso y, con ellos te presentarás al rey de Egipto. Tú le dirás: El Dios de los hebreos, Yavé, nos salió al encuentro: deja que caminemos tres días por el desierto, para ofrecer sacrificios a Yavé, nuestro Dios.
19. Yo ya sé que el rey de los egipcios no los dejará ir, si no es obligado por la fuerza.
20. Por esto Yo extenderé mi mano y azotaré a Egipto con toda clase de males extraordinarios, de manera que él mismo los echará fuera.
21. Yo moveré a los egipcios para que traten bien a mi gente, y al salir no se irán con las manos vacías.
22. Cada mujer pida a su vecina o a la persona que comparte su casa objetos de plata y oro y también vestidos; sus hijos e hijas se los pondrán, y así dejarán sin nada a los egipcios.» |