Después de muchísimos años la raza humana se había multiplicado sobre la tierra. Dios vio que era grande la maldad de los hombres y se arrepintió de haberlos creado.
Sólo había uno bueno, llamado Noé, y Dios le dijo:
-La tierra está llena de malicia por culpa de los hombres; por ello voy a exterminarlos.
A continuación, le explicó la manera de construir una enorme arca de madera recubierta de brea; como un barco de tres pisos.
Cuando estuvo terminada el arca, Dios dijo a Noé que metiera en ella a toda clase de animales, en parejas de macho y hembra; que cargara provisiones en abundancia y que se encerrara dentro con su esposa, sus tres hijos, Sem, Cam, Jafet y sus mujeres.
Durante cuarenta días y sus noches, no cesaron de caer cascadas de agua y todo ser viviente pereció ahogado. |