JESUS HACE MILAGROS |
||||
1. Ustedes saben que Jesús hizo muchos milagros ¿no? … 2. ¿Alguien se recuerda de alguno de esos milagros que hizo Jesús? … 3. ¿Qué es un milagro? Es algo que hace Dios solamente. Es algo que Dios hace que es distinto a como suceden las cosas normalmente. Por eso decimos que un milagro es algo extraordinario, porque lo que sucede en un milagro no es lo que sucede normalmente.
Las personas no pueden hacer milagros. Sólo Dios. Si una persona ora por algún enfermo y ese enfermo mejora o se cura, no es porque esa persona puede curar, sino que es Dios el que cura.
Jesús hizo milagros principalmente para mostrarnos que El es Dios. Como Dios es el único que puede hacer milagros, Jesús hizo milagros para que la gente se diera cuenta que El era Dios. También Jesús hizo milagros para ayudar a la gente: a los enfermos, a los ciegos, a los paralíticos…hasta a los muertos.
Ahhh! Es que entre los milagros que Jesús hizo revivió a varias personas que estaban muertas.
Hubo tres personas que Jesús revivió. La primera fue una niña de 12 años. El papá de la niña fue a buscar a Jesús para que la curara. Resulta que Jesús se tardó en llegar a la casa de la niñita enferma y ya la gente estaba llorando porque la niñita se había muerto. Pero entonces el milagro que hizo Jesús fue volverla a la vida. El segundo fue un muchacho un poco mayor. Jesús iba pasando por un pueblo llamado Naím. Y a la entrada del pueblo encontró que llevaban a enterrar a este muchacho, que era el único hijo de una señora viuda, porque su esposo había muerto hacía un tiempo. Esta mamá lloraba desconsolada, por supuesto, pero ella no le pidió nada a Jesús. Sin embargo, Jesús se le acercó y le dijo que no llorara. Lo que menos se imaginó esta señora fue cómo era que Jesús la iba a consolar! ¿Qué creen ustedes que hizo Jesús? Jesús le ordenó al muchacho muerto que se levantara. ¿Cómo es esto que viene alguien y le dice al muerto que se levante? Pues así fue: el muchacho se levantó vivo y Jesús se lo entregó a su mamá. ¿Se imaginan ustedes la impresión del gentío? ¡Ya lo llevaban a enterrar y antes de que llegaran al sitio del entierro, Jesús lo volvió a la vida! ¿Qué creen ustedes que pensó la gente cuando vio este milagro? Pensaban que Jesús era alguien muy especial y con mucho poder, porque para levantar un muerto se necesita tener poder de verdad. Y ¿quién es el que tiene un poder así? Sólo Dios. Entonces, ¿qué estaba tratando de demostrar Jesús con este milagro tan grande? Jesús quería que la gente se diera cuenta que El era Dios. El tercer muerto que Jesús hizo volver a la vida fue un gran amigo de El que se llamaba Lázaro. Lázaro y sus hermanas, María y Marta, eran muy amigos de Jesús y Jesús iba con frecuencia de visita casa de ellos. Un día le avisaron a Jesús que Lázaro estaba muy enfermo, y Jesús llegó cuando ya Lázaro tenía enterrado cuatro días. Y Jesús llora al saber que su amigo había muerto. Y enterrado desde hacía cuatro días ¿ustedes creen que Jesús podía hacer algo? Claro que sí, porque Jesús es Dios, y para Dios no hay nada imposible. Si El quiere, El lo hace. La cosa es que lo quiera. ¿Qué se imaginan ustedes que hizo Jesús? Jesús manda a que lo lleven a donde estaba Lázaro enterrado. Las tumbas en esa época de Jesús eran como cuevas. Jesús manda a retirar la roca que cubría la entrada de la tumba. Y hacía tanto tiempo que Lázaro había muerto, que ya hasta olía mal el cuerpo que se estaba descomponiendo. Y entonces Jesús le habla con voz bien fuerte a su amigo Lázaro: Lázaro, ¡sal fuera! Cual no sería la impresión de todo el mundo que Lázaro salió. Eso sí: no podía caminar bien, porque a los muertos en esa época les vendaban todo el cuerpo y tenía la cabeza tapada con un paño. Entonces Jesús dio orden que le quitaran todas esas vendas para que pudiera moverse bien. Y así fue. Y los que estaban allí creyero en Jesús y fueron a regar la noticia por todas partes. ¡Tremendo milagro! Revivir un muerto que llevaba varios días en su tumba. 6. Aparte de revivir esos muertos, Jesús curó muchos enfermos: ciegos, sordos, gente que no podía caminar por ser cojos y hasta paralíticos. También curó a varios leprosos. Pero hay un milagro en que Jesús dio de comer a un gentío inmenso. Sucedió que un día Jesús quiso estar solo en un sitio, pero como había hecho tantos milagros, lo siguió un gentío muy grande que quería estar con El. El se puso a hablarles, curó unos cuantos enfermos. Y como fue pasando el tiempo, se hizo bastante tarde. Los Apóstoles le dijeron a Jesús que despidiera al gentío, porque estaban en el campo y no había donde comer. Pero le podemos dar de comer nosotros, les dijo Jesús. ¿Cómo? le dijeron los Apóstoles. No tenemos dinero para ir a la ciudad a buscar pan para tanta gente. Jesús le preguntó ¿Y ustedes no tienen nada de comer por ahí? Sí. Tenemos sólo unos cinco panes y dos pescados. Pero eso no alcanza para este gentío. Jesús le dijo a los Apóstoles que los mandaran a sentar sobre la grama. Y la gente se sentó en grupos grandes de 50 a 100 personas. Entonces Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y levantando los ojos al Cielo, dando gracias al Padre, bendijo los panes y se los dio a los Apóstoles, para que los repartieran. ¿Y qué creen ustedes que sucedió? Que los Apóstoles repartían y repartían panes y pescados y salían y salían más panes y más pescados. Y la gente comió hasta comer bien completo. Por eso este milagro se llama el de la multiplicación de los panes y los peces, porque los panes y los peces se iban multiplicando mientras los apóstoles iban repartiendo. Sacaban panes de las cestas, los entregaban y al voltear a ver, la cesta se seguía llenando de panes. Y así comió todo el mundo y hasta sobraron doce cestas llenas de panes y peces. ¿Y ustedes saben cuánta gente comió? Los hombres eran 5 mil. Y si sumamos las mujeres y los niños, pueden haber sido como unas 20 mil personas. 7. ¿Qué nos muestra este Milagro de la Multiplicación de los Panes y los Peces y los demás milagros que hizo Jesús? Que Jesús está pendiente de nuestras necesidades. El tuvo compasión de la gente que estaba tan lejos de donde podían comprar comida y que lo estaba siguiendo y escuchando. Que Jesús es Dios y que para El no hay nada imposible. Si El lo quiere, El lo hace.
ORACION de Amor a Dios:
PADRE NUESTRO
Memorizar y orar:
Memorizar:
AVE MARIA |
||||
|
||||